Entre vacaciones y más vacaciones y después de mi vuelta de la playa, sólo pienso en lo refrita que termina la gente con tanto sol, el cual el resto del año casi ni olemos ni vemos, y al que nos cuesta adaptar la vista después de tanta oscuridad.
Es entre gracioso y ridículo ver como el sol nos iguala, ya que todos somos vulnerables frente a él.
Aún así es maravilloso disfrutarlo en toda su plenitud unos cuantos días al año...
Para todos los que ya os hayais ido de vacaciones y para los que os iréis dentro de poco os dedico esta canción:
El sol mío
¡Qué cosa bella es un día de sol!
el aire sereno después de una tempestad,
por el aire tan fresco parece una fiesta,
¡qué cosa bella es un día de sol!
Pero otro sol,
qué es aún más bello,
el sol mío,
está frente a ti,
el sol, el sol mío,
¡está frente a ti!,
¡está frente a ti!
Cuando llega la noche y el sol se oculta,
casi me entra la melancolía,
estoy de pie bajo tu ventana,
cuando llega la noche y el sol se oculta.
Pero otro sol,
qué es aún más bello,
el sol mío,
está frente a ti,
el sol, el sol mío,
¡está frente a ti!,
¡está frente a ti!,
¡Qué cosa bella es un día de sol!
el aire sereno después de una tempestad,
por el aire tan fresco parece una fiesta,
¡qué cosa bella es un día de sol!
Pero otro sol,
qué es aún más bello,
el sol mío,
está frente a ti,
el sol, el sol mío,
¡está frente a ti!,
¡está frente a ti!
Cuando llega la noche y el sol se oculta,
casi me entra la melancolía,
estoy de pie bajo tu ventana,
cuando llega la noche y el sol se oculta.
Pero otro sol,
qué es aún más bello,
el sol mío,
está frente a ti,
el sol, el sol mío,
¡está frente a ti!,
¡está frente a ti!,
