30 octubre, 2006

Vivos

El pasado sábado fui al pueblo de mi padre, Almadén, un pueblo al sur de Ciudad Real. Fuimos al cementerio para arreglar las flores y limpiar los nichos de varios familiares. Me quedé bastante impresionada con todo lo que sentí y viví.
Había montones de personas que como nosotros, mi padre y yo, habían ido a arreglar las tumbas y nichos de sus familiares, ya que se aproxima el Día de Todos los Santos (el 1 de noviembre).
Todo esto me hizo pensar en que todos necesitamos un punto de encuentro con la gente que ya no está, un sitio donde reunirnos con nuestros recuerdos y buenos momentos.
Mientras veía la mano temblorosa de un hombre mayor intentando clavar unas flores de plastico en un centro de goma espuma que más tarde pondría en un jarrón del nicho de sus padres o tal vez de algún hermano que murió hace años, sentí una ternura increible ya que encontré en ese gesto tan sencillo e insignificante un amor desmesurado. Sentí que en ese momento miles de recuerdos pasaban por su mente y que por nada del mundo dejaría que estos muriesen.
Necesitamos mantener a quien queremos VIVO, necesitamos cuidarle, mimarle, llevarle flores, limpiar su tumba, llorarle o cantarle, porque si sentimos que todo eso ya no existe algo se muere en nosotros. Cada uno de los recuerdos de esa persona que ya no está nos hace sentir que la vida merece la pena y que tal vez la muerte sólo sea un paso más.
Somos capaces de abrazar a la ausencia que dejan y convertirla en una presencia diaria en nuestras vidas.
Con mirar un poco al mundo vemos que en Estados Unidos se celebra Halloween, en México el Día de Muertos, aquí en España el Día de Todos los Santos, y a saber cuantas fiestas más existen celebrando nuestros recuerdos, la muerte, las lágrimas y la vida.
Celebramos la muerte tanto como celebramos la vida, entonces...
¿Por qué tanto miedo a la muerte?

5 comentarios:

_jazz_ dijo...

¿por qué tanto miedo a la muerte?

lo evidente es que perdemos a esa persona a la que tanto queremos y tanto necesitamos, por otro lado la muerte de nuestros seres queridos nos hace ser conscientes de que nuestra propia muerte llegará.
Mi abuela, cuando era pequeña, le decía a mi bisabuela: "Mamá, yo nunca voy a morir porque nunca voy a cerrar los ojos"
Yo de pequeña pensaba que la muerte era que te hacías viejo y te metían en un ataúd (era bruta como yo sola)
Bueno, tanta parrafada para concluir con una frase a tu pregunta:
"El hombre teme a la muerte porque ama la vida" Dostoieski

Unknown dijo...

El miedo siempre es sólo un estorbo. Si tienes miedo a caer, te caerás; si tienes miedo a fallar, fallarás. No temas a la muerte y vivirás eternamente, aunque ¿quién quiere vivir para siempre?

Por cierto... Puto panda!!! Por muchas vueltas que le doy a la cabeza no consigo que se le caiga :(

diddy83 dijo...

Si te acercaras a una residencia de ancianos te darías cuenta que lo que menos se tiene allí es miedo a la muerte, es más, muchos de ellos, al haber fallecido su pareja, abrazarían a la muerte gustosos. Como tú hoy día 1 de Noviembre he ido al cementerio, aunque no sé por qué, es cierto que hemos puesto flores, y mi familia se ha santiguado, pero yo he mirado a otro lado. Respeta a tus muertos en tu memoria y así seguirán vivos, ellos ya no pueden oler las flores que pones en su tumba, ni siquiera saben que eso es su tumba. Eso que pones en tu post de que el gesto de aquel hombre te pareció tierno..., yo he visto montones de gente así hoy en el cementerio, y lo único que me inspiraban era que hacían eso por costumbre. A la entrada del cementerio había un grupo de marujas cotorreando a todo pulmón, vamos, que van a poner flores en la tumba de sus seres más queridos por respeto pero ese respeto se les olvida cuando ven a su homogénea para charlar. Como siempre el ser humano está lleno de contradicciones basurdas. Somos jóvenes, nos queda mucho por delante aún, pero si tuviera que morir hoy por lo menos te habría dejado este comentario, y..., volvería en forma de espíritu para patear el culo de algunos profesores, je, je, je,...

Gori dijo...

Vi a mucha otra gente pero me impresionó el anciano porque vi en él un gesto sincero. Mucha otra gente sólo iba a saludar a la gente que se encontraba del pueblo o simplemente llenaba cubos de agua por terminar de limpiar la tumba como quien limpia otra baldosa más de su cocina.
Creo que en una situación así, con los ojos abiertos como los tenía en ese momento me di cuenta de que mucha gente estaba allí como quien celebra una fiesta del Corte Inglés (hay q hacer esto porque es San... Algo, y es el día) y otra gente que lo hacía porque realmente le faltaba algo y sentía que debía cuidar todo eso.
A veces olvidamos la esencia de las cosas, supongo q será eso.
Creo que la gente se divide entre la que quiere q le escuchen y la que quiere escuchar, y en algo así se ve bastante bien las diferencias.
Un beso Diddy y gracias por tu comentario.
Otro saludito para los demás.

Anónimo dijo...

Te voy a contar mi experiencia: Cada día de mi vida me acuerdo de mi tia, me levanto y ya me acuerdo de ella, la hablo por las noches, por la mañana, mientras conduzco...Ayer en el cementerio entre por la parte de atrás y no me orientaba donde estaba su cuerpo, llegó un momento en que empecé a desesperarme, dejé la mano de mi Aro a Carlos y me dejé llevar por el corazón, parecía que los ángeles q guardan su cuerpo me llamaron, fui pasando entre y una y otra y otra tumba y de repente alli estaba...enfrente de la virgen q tiene esculpida, con lágrimas en los ojos y una angustia horrible, le dije: no te encontraba, t habia perdido...Sentí q me habia estado esperando diciendo:mi pequeña estaba aquí...El resto de la gente estaba alli por cumplir, rezan, lloran...Le dije tita me voy, hay mucha gente, esta noche nos vemos..
No hace falta un día especial, pero a veces la gente necesita una excusa..Bienvenida la excusa!