La vida parece que es como un columpio. A veces sientes que el viento roza tu cara mientras notas que te acercas a las estrellas y otras te alejas de tus sueños, de cierta gente, de la vida que deseabas tener.
Supongo que lo importante es ser consciente de que por nada del mundo debemos dejar de darnos impulso o dejar que alguien nos empuje por detrás, porque si paramos, luego será muy difícil volver a empezar (nos volvemos torpes y perezosos).
Lo malo de todo esto me imagino que es cuando nos lanzamos y sentimos cosquillas en el estómago de la emoción hacia cierta gente o ciertos sueños y simplemente eso se aleja o nos damos cuenta de que tanta ilusión y ganas no eran necesarios. Hay que aceptar que no todo el mundo sigue la misma oscilación y ritmo que nosotros. Hay veces que uno se acerca mientras los otros se alejan y no por ello es nada malo.
Aunque claro todo esto es la teoría...¿ALGUIEN SE MONTA CONMIGO?