Me he encontrado con un poema de Benedetti. A veces nos hace falta escuchar cierto tipo de palabras... sentir que no estamos solos y sentir un nuevo aliento cuando nos cansamos de luchar, cuando no hacemos más que mirar al suelo en vez de al cielo.
Creo que en la vida nos definen no las dificultades por las que pasamos (unas demasiado grandes -enfermedades, cosas sin solución, pérdidas irreparables- o demasiado pequeñas pero que nos oscurecen el día a día) sino el cómo reaccionamos ante ellas: huida, cinismo, superación, alegría, realismo, pesimismo, valentía...
Así que sólo nos queda echarnos a volar, probar que las veces que hemos tenido éxito es porque hemos dado todo lo que teníamos dentro, y las que hemos fallado que no hay nada que no se solucione tirándonos otra vez desde un precipicio, llenando bien de oxígeno nuestros pulmones y desplegando todo lo que podemos nuestras alas.
NO TE RINDAS
No te rindas, aun estas a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
liberar el lastre, retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque la vida es tuya y tuyo tambien el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto,
porque no hay heridas que no cure el tiempo,
abrir las puertas quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron.
Vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa, ensayar el canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos,
No te rindas por favor no cedas,
aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aun hay fuego en tu alma,
aun hay vida en tus sueños,
porque cada dia es un comienzo,
porque esta es la hora y el mejor momento,
porque no estas sola,
porque yo te quiero.
Mario Benedetti
